Los latinoamericanos en la mira de los bancos españoles para abrir cuentas y financiar hipotecas
La migración de latinoamericanos hacia España, después de la de los marroquíes, es la segunda fuerza para la reactivación económica y el rejuvenecimiento de la población de ese país europeo.
Después de las crisis inmobiliarias españolas, al parecer, la llegada de latinoamericanos, que a su vez huyen de las crisis en sus países, principalmente de Venezuela, Ecuador o República Dominicana, están revitalizando los barrios y la ciudades que se habían quedado como en un impass.
De acuerdo con su Instituto Nacional de Estadística, en España hoy viven alrededor de un millón y medio de latinoamericanos, aunque se estima que pueden ser más por aquellos que ya lograron nacionalizarse o ya tenían la doble nacionalidad.
Se dice que la llegada y el asentamiento de latinoamericanos está cambiando los paisajes urbanos en distintos lugares del país. Un ejemplo es el céntrico barrio de Tetuán donde los dominicanos han abierto sus negocios de todo tipo.
Lo mismo sucede en otros barrios más de la capital española. En Carabanchel, el distrito más grande de Madrid y donde más migrantes viven, es posible encontrar negocios que aluden al espíritu de los migrantes como tiendas y comederos, tiendas especializadas en comestibles originarios de diversos países de latinoamérica como Perú y Ecuador. También es factible encontrar establecimientos para envío de remesas a sus países natales.
Esta nueva población en los distintos lugares de las ciudades ha ampliado el mercado de la vivienda, el consumo, los servicios bancarios y los de envío de remesas. Asimismo, las cadenas de distribución han diversificado sus productos y los servicios relacionados con éstas.
El marketing está entendiendo muy bien a los consumidores migrantes y sus propias necesidades. Ahora, las instituciones financieras tienen en los latinoamericanos un objetivo clave para motivarlos a abrir cuentas corrientes y financiar hipotecas.
Vale la pena señalar que el impacto derivado de la llegada de los migrantes latinoamericanos no solamente se ha dado en barrios tradicionalmente obreros como Tetuán o Carabanchel, se ha extendido a zonas de la capital. Las clases altas también han encontrado donde asentarse e invertir en Madrid. Desde 2014, con la crisis de Venezuela, muchos migrantes venezolanos se encuentran en lugares como el barrio Salamanca, el más exclusivo del centro.
Especialistas del sector inmobiliario han contado a BBC Mundo sobre la revitalización de esta zona a raíz, por la inversión en inmuebles de grandes fortunas venezolanas, en primer lugar y por otros interesados en invertir ahí, como los mexicanos, colombianos y peruanos, llegando a ocupar un 60% de las ventas en el barrio de Salamanca.
Asimismo, los asesores inmobiliarios han mencionado que los compradores latinoamericanos han contribuido a mejorar el comercio y la restauración del barrio, dándole un valor añadido. Se mira en las restauraciones, el alquiler de locales comerciales y la apertura de restaurantes.
Respecto a las inversiones latinoamericanas son un fenómeno consolidado en el mundo y en los últimos años España se ha convertido en uno de los principales destinos.
Según datos de la Oficina de Exportación e Inversiones de España, Latinoamérica es el cuarto inversor en importancia en España, por detrás de Estados Unidos, Reino Unido y Francia, y por delante de China y Alemania. Este fenómeno se ha ido acelerando y acrecentando según el doctor en economía de la Universidad Pontificia Comillas de Madrid, Alfredo Arahuetes.
El especialista explica que el mayor peso de inversión latinoamericana en España viene de México, un ejemplo fue la adquisición por parte de Carlos Slim de la constructora española FCC en medio de la crisis financiera e inmobiliaria que afectó al país entre 2009 y 2015. La inversión de capitales latinoamericanos en sectores profundamente dañados, como el inmobiliario y el financiero, mitigó la crisis.