La Comisión Europea, el Pacto Verde y el sector construcción
En 2019, la Comisión Europea ante los países miembros de la Unión Europea puso sobre la mesa este Pacto Verde que incluye normas para el cuidado del medio ambiente, mismas que tienen que ver con que sus procesos y actividades sean amigables con la ecología, adaptados a una economía circular y eficientes en energía. Esto incluye al sector de la construcción de bienes inmuebles.
Recientemente, en 2021 propuso una “oleada de renovación” para crear edificios ecológicamente sustentables, y estas acciones tendrían que adoptarse en este año y los subsecuentes para que en 2030 se logre reducir en un 60% la emisión de gases invernadero por parte de los edificios y construcciones.
Esto surge a partir de que en Europa solamente el 1% de los edificios son objeto de renovaciones para reducir el consumo de energía. Se trata de incentivar la participación del sector de la construcción para descarbonizarse, combatir la pobreza energética y recuperar la economía.
¿Cuál es la situación de los edificios y la energía?
40% de la energía de la UE es consumida por los edificios y estos generan 36% de los gases efecto invernadero.
2 de cada 3 edificios no son eficientes desde el punto de vista energético y la mayoría están habitados por familias de bajos ingresos.
Entre el 85% y 95% de estos edificios seguirán en pie en 2050.
Cabe considerar que:
Es crucial renovarlos para reducir emisiones y el consumo de energía.
Estos cambios contribuirán a la recuperación económica después de la crisis por Covid-19 y la generación de empleos.
Se podrán reducir los costos de energía en los hogares y elevar la calidad de vida.
Cuál es la propuesta:
Mejorar el rendimiento energético en los edificios.
Hacer énfasis en la circularidad: diseños ecológicos, prácticas sostenibles, reciclaje de materiales y uso de insumos locales.
Ofrecer ayuda financiera a los proyectos, tanto del sector público como de la iniciativa privada y contar con préstamos verdes.
Ser flexibles, buscar la rentabilidad y respetar las particularidades de cada nación.
Queda claro que este esfuerzo no puede retrasarse más por la emergencia que está representando el cambio climático no solo en Europa sino en la totalidad del planeta.